sábado, 1 de mayo de 2010

Complejo de Edipo y sus tres tiempos.

El complejo de Edipo se refiere a los vínculos afectivos que crea todo niño con los primeros con que se relacione, los cuales generalmente son los padres o en tal caso que nos sean ellos, son sus cuidadores. Freud toma el nombre de Edipo, de la saga de Sófocles “Edipo rey”. El complejo de Edipo, se fundamenta en que el infante tiene deseos de eliminar al padre y tomar a la madre; surge allí posteriormente la prohibición del incesto (ley universal). El complejo de Edipo, es la fuente de la conciencia de culpa, funda prácticamente la moral y la religión. Es de vital importancia tal complejo, pues este es quien determina la estructura psíquica de a persona.

Los tres tiempos del Edipo.

Primer tiempo: el niño es el falo, la madre siente a su hijo como su falo, el niño intenta satisfacer el deseo de su madre. Aquí el sujeto se identifica en espejo con lo que es objeto del deseo de la madre. Para gustarle a la madre “es suficiente con ser el falo”. La madre sume a su hijo en una ley caprichosa, lo que allá desea. La madre está en el lugar del Otro, en el sentido en que esta ocupa el lugar del padre, esto porque la madre le aporta al niño el lenguaje, lo anterior es muy importante, pues gracias a las palabras es que el niño comienza a demandar y no a gritar y a llorar, demandar es comenzar a traducir en palabras sus necesidades.

“Lo que lo hace salir de esa etapa, es el miedo, gracias al cual se percata de la falta de dominio externo y, al comenzar a observar a su alrededor, lo primero que nota es que su madre, tiene una determinada relación con el padre”. Si el niño no logra salir de este primer tiempo, lo más posible es que su estructura psíquica se ubique en la perversión.

Segundo tiempo: aquí aparece el padre, priva a la madre de su objeto fálico y priva a l niño de su objeto de deseo.
El padre se afirma en su presencia privadora, ya que es él quien soporta la ley, en una forma mediada por la madre que es quien lo establece como el dictador de dicha ley, la ley que aquí surge y fundamenta todo, es la ley del incesto (es universal).
Lo que debe quedar inscrito en todo neurótico “normal” es la prohibición del incesto y la castración.


Tercer tiempo:el padre es alguien que acepta la ley. Él puede darle a la madre lo que ella desea, porque lo tiene. Interviene como el que tiene el falo y no como el que lo es.
Es la salida del complejo de Edipo. La salida es favorable si la identificación con el padre se produce en este periodo, lo que se puede entender como “ideal del yo”.
El ideal del yo, puede ser entendido como una constelación de insignias, que marca de manera exterior y da una función o un cargo; son un elemento material, son un significante que ubica a la persona.

Comentario sobre lo que es Ser Verdadero Hombre.

Imagen: La fabricaión del hombre nuevo. Salvador Dali

Es muy interesante ver como muchos hombres se esconden en sus musculitos, sus comportamientos machistas, su "fuerza", entre otras mas cosas para no mostrar su indecisión sexual, cuando digo indecisión sexual, no me estoy refiriendo a que sean homsexuales, me refiero a que no han hallado suficientes aspectos, criterios o características que les digan que son hombres realmente. Quizás miran su pene y es este el mayor argumento, mas en realidad en su estructura psíquica existen una cantidad de imagenes y pensamientos que le generan tal indecisión, que en ellos es sentida como angustia, pues según ellos, ha veces sienten cosas que no deberían sentir, como cuando un hombre los toca, le habla mirándole a los ojos, entre otras cosas, sin mencionar la atracción que les puede generar uno que otro hombre.

El falo es muy importante, mas no es el que dicta que el que lo tenga es un verdadero hombre, si mas bien es un ser masculino y ya, pues la verdadera hombría en mi concepto va mas a alla que tener un pene,que querer mostrar que se es fuerte, todo poderoso. Apoyandome en lo aprendido en clase, "el verdadero hombre es aquel que desea a la mujer sin ambages, sin rodeos, en la medida en que no teme a la castración femenina, aquel que “está lo suficientemente despegado del falo de la madre para saber -y no temer- que la mujer no lo tiene.” (Miller). ", en fin, consta de ver a la mujer completa, y de igual manera el sentirse completo, sin sentirse superior por que tiene y la mujer no.